Desde hace años se conoce la ubicación de unas cuevas en la vivían personas sin medios. El tiempo pasó y hoy día se sabe que sirven para que muchos desalmados mantengan encerrados allí todo tipo de animales.
Algunas cuevas sirven de resguardo al ganado, otras para guardar perros de cazadores y otras para guardar animales que esperan su muerte a base de torturas.
Salvajes que disfrutan grabando en video la masacre de estos inocentes…
El día 01 de noviembre miembros de Sofía El Refugio Escuela se personaron en algunas de esas cuevas y fueron testigos del horror que allí se vive una y otra vez.
Fuera y dentro de las cuevas la situación es insalubre, los animales carecen de agua y comida.
Madres con sus cachorros recién nacidos sin ningún tipo de asistencia, bebés vivos y muertos conviven juntos.
Animales enfermos que no reciben la atención necesaria: sarna, pulgas, mosquitos… Un foco de muerte y sufrimiento.
Muertos de miedo esperando a que les llegue su momento. Ciertos indeseables disfrutarán con su muerte. Esto no puede quedar así.
La crueldad sirve para el entretenimiento de criminales sin escrúpulos.
Cadáveres decapitados y quemados esperan a las puertas de las cuevas a unirse de nuevo a la tierra y no volver jamás a este mundo salvaje.
Hay muchos, y esperan la oportunidad de que vayan a por ellos para devolverles la felicidad.
Algunos han salido, pero quedan muchos más.
Algunos están a salvo, pero es necesario clausurar esas cuevas para evitar que estas imágenes vuelvan a repetirse.
Y conseguir que la gente los trate con el respeto y cariño que se merecen.
Cerremos las cuevas, denunciemos a esos salvajes sin escrúpulos para que en adelante sólo encontremos felicidad en sus corazones.
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