MANIFESTACION
Ocho activistas se enjaulan en la Puerta del Sol para protestar por el maltrato a los animales
LUIGI BENEDICTO BORGESMADRID. - Ni el día festivo ni el frío frenaron ayer el ímpetu de los activistas que acudieron a la Puerta del Sol con el objetivo de poner fin al «especismo», o lo que es lo mismo, el menosprecio que, a su entender, ejerce el ser humano frente a los animales por no pertenecer a la misma especie. Lo hicieron desnudándose y enjaulándose.
«Nuestra idea es hacer ver a la población que los animales deben tener los mismos privilegios que los hombres, por eso aprovechamos la celebración del Día Internacional de los Derechos Humanos del 10 de diciembre para reclamar que se cree un día de iguales características para los animales», explicaba Sharon Núñez, portavoz de la asociación internacional Igualdad Animal.
El momento más impactante de la protesta, que congregó a un centenar de personas entre activistas y curiosos, se produjo cuando ocho manifestantes se quitaron sus vestimentas y se introdujeron en varias jaulas herrumbrosas. «Son jaulas legales, extraídas por nosotros mismos de una granja de explotación intensiva, y con este acto queremos que la gente observe el reducido espacio en el que tienen que vivir los animales», se justificaba Sharon mientras los activistas encerrados comprobaban rápidamente que la escueta ropa interior color carne con la que se vestían no iba a frenar sus temblores.
«Tortura», «asfixia», «exterminio» o «envenenamiento» fueron algunas de las palabras utilizadas para concienciar a los paseantes del mal que hacen los hombres en base a una superioridad «autoimpuesta y sin sentido». «No podemos utilizar otras vidas en nuestro beneficio, la gente tiene que hacerse vegetariana», se quejaba una señora que portaba un cartel donde aparecía un toro agonizando bajo el lema «No más matanzas».
Junto a la fiesta nacional, los zoológicos y los circos también fueron objetos de decenas de críticas. Mientras, algunos organizadores aprovecharon para repartir folletos y vender chapas y camisetas en un puesto montado para la ocasión. Con el dinero recaudado, invertirán en acciones englobadas dentro del término Rescate Abierto. La más reciente, la «liberación» de seis bebés cerdos, que fueron sacados de una granja «para darles una nueva vida antes de que fueran asesinados en algún matadero porque la gente se cree que son sus esclavos».
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